Aprende hacer mascarrillas faciales

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limpiezas faciales

Tener un rostro de porcelana es el objetivo de toda una diva, nos encanta cuidar de nuestro cutis, buscamos las mejores cremas, recetas para así obtener los mejores beneficios para nuestra cara.

Existen limpiezas faciales que las puedes adquirir en los súper mercados, farmacias, en tienda de cosméticos en un sinfín de lugares, pero nada como hacer tus propias mascarillas a base de frutas, vegetales, aceites aromáticos o plantas.

Recuerda que un cuidado correcto en  nuestro rostro es fundamental para conservar la suavidad. La limpieza facial es tan imprescindible como la hidratación, y es que esta permite que la dermis “respire” y los poros no queden obstruidos.

Aquí te mostraremos algunas de las opciones que puedes realizar desde tu hogar, no son difíciles de hacer y nada costosas.

  1. Aceite de oliva

Está presente en la mayoría de los hogares y es muy eficaz para limpiar la piel profundamente. Remueva impurezas y deja el cutis suave y terso. El aceite de oliva es un maravilloso desmaquillante y un potente limpiador. No dudes en usarlo todas las noches antes de dormir.

  • Aplícalo con un algodón y haz movimientos circulares comenzando en la frente. Baja por la nariz, sigue por las mejillas, continúa por el mentón y termina en el cuello.
  1. Mascarilla de clara de huevo y miel

Es una combinación increíble porque, además de limpiar la piel, evita las infecciones y deja el cutis muy terso. Lo mejor de todo es que contribuye a regular la producción excesiva de grasa, sobre todo en aquellos que tienen tendencia a padecer acné.

Ingredientes:

  • 1 clara de huevo
  • 1 cucharada de miel (15 gramos)

Preparación:

  • En un recipiente coloca la clara de huevo (la yema déjala para alguna receta) y bate ligeramente.
  • Añade la miel y mezcla para obtener una crema homogénea.
  • Aplica en el rostro con movimientos circulares y deja actuar 15 minutos.
  • Pasado ese tiempo, enjuaga con agua tibia.
  • Para terminar, aplica una crema hidratante suave.
  1. Mascarilla de avena y leche

La avena es un exfoliante natural maravilloso y 100% natural. Al combinarlo con la leche aprovecharás las bondades de este lácteo como humectante. Por lo tanto, en un mismo tratamiento eliminarás las impurezas e hidratarás la zona.

Ingredientes

  • 3 cucharadas de avena (30 g)
  • 3 cucharadas de leche (30 ml)

Preparación

  • En un recipiente coloca la avena y añade de a poco la leche.
  • Mezcla para formar una pasta.

Aplica en el rostro limpio y seco con masajes circulares, haciendo hincapié en la frente y en la nariz.

Retira con agua tibia.

  1. Mascarilla de arcilla verde y aceite de oliva

La arcilla verde se consigue en las casas naturistas y es muy buena para eliminar las impurezas de la piel. Mezclada con el aceite de oliva, que humecta, conseguimos un tratamiento integral y fácil de preparar.

Ingredientes:

  • 2 cucharadas de arcilla verde (20 g)
  • 2 cucharadas de aceite de oliva (32 g)

Preparación:

En un recipiente coloca la arcilla verde.

Agrega el aceite de oliva y mezcla bien para formar una pasta.

Esparce por el rostro después de bañarte y, tras 15 minutos, enjuaga con abundante agua tibia.

  1. Mascarilla de yogur y miel

El yogur tiene propiedades similares a la leche pero lo bueno es que su consistencia es más adecuada para hacer una mascarilla. Si le añades miel a la receta conseguirás una piel limpia y fresca en unos minutos.

Ingredientes:

  • 1 yogur natural (125 g)
  • 2 cucharadas de miel (50 gramos)

Preparación:

Echa la miel en el pote de yogur y remueve bien.

Aplica la mezcla en el rostro y deja que actúe 20 minutos.

Retira con papel absorbente o agua tibia.

  1. Mascarilla de pepino y yogur

Por supuesto, no podía faltar una receta para limpieza facial con pepino, ya que es uno de los elementos por excelencia en los salones de belleza. Junto al yogur forman una pareja increíble y con resultados desde la primera aplicación.

Ingredientes

  • ½ pepino mediano o 1 pequeño.
  • ½ yogur natural (62,5 g)

Preparación

Primero, pela el pepino y córtalo en rodajas.

A continuación, ponlo en el vaso de la batidora junto con el yogur y procesa durante unos minutos.

Aplica la mezcla sobre el rostro, tras haberlo lavado y secado y déjalo actuar por  20 minutos y luego retíralo con agua tibia.