Fuimos creadas con amor, paz y equilibrio, el universo hizo nuestra mejor versión para disfrutar de la vida, pero con el pasar del tiempo y de las experiencias vividas, nuestra alma ha creado un escudo contra el mundo externo. No aceptamos más heridas en nuestro ser.
Momentos que nos marcaron y crearon una ruda imagen de nosotras, y que nos llevaron a tomar decisiones radicales sin importar las reacciones de las demás personas.
Hemos sido muy nosotras en estos últimos tiempo, nos importa salvarnos del mundo tan cruel que vivimos, sin hacerle daño a nadie pero con la firmeza que no nos lo harán, seguimos caminado con la mira firme en un norte sin tomarnos en tiempo de mirar a los lados o atrás.
Creamos un alma a prueba de balas y no tomamos en cuenta los sentimientos de las demás personas que muchas veces son ajenas a nuestro pasado, pensamos que si decidimos bajar la guardia por un instante, nos volverán a herir y eso no pasara nuevamente en nosotras pues no está en los planes.
Las almas se atraer de una u otra manera, y sabemos que en algún lugar del universo existen las personas ideales que llegaran sin mucho alboroto al decir no estás sola, estamos aquí para seguir un camino lleno de éxitos y oportunidades.
Quizás la espera sea larga o corto, con sabor a picante o a dulce, pero solo sabemos que estamos aquí para disfrutar de la vida sin ningún drama o problema. Somos seres de felicidad
