La autoevaluación es un proceso que muchas personas no saben realizar, ya que algunas veces se castigan diciéndose cientos de cosas negativas de ellas mismas. El enfocarse y subrayar aspectos negativos no ayudara a pasar al otro nivel de equilibrio emocional, al contrario se hundirán cada vez más en un agujero sin fondo.
Criticarse rudamente por momentos o acciones en tu vida solo desencadenara grandes sufrimientos en el alma del ser humano. 
Porque no le damos la vuelta a la vida y te miras al espejo y das gracias por tener una vida y seguir disfrutándola, por ser la persona que eres con tus defectos y virtudes, ese ser que goza de cada respirar, y no sigues dándote cachetadas de dolor.
Borra de tu mente el qué dirán de las personas que no aportan nada positivo a tu vida, da cada paso con firmeza y seguridad en ti misma, llena esos vacíos de risas y alegrías, que cuando tu otro yo te quiere recordar lo terrible que eres, salgas victoriosa y le digas “Vete que esté no es tú camino”. Saca todos los días esa mujer valiente, hermosa y que no le tiene miedo a nada, siéntete orgullosa de lo que te has convertido y si no te gusta algo, trabájalo pero desde la sanación personal y no desde los latigazos de críticas.
Ahora mírate al espejo sin máscaras, sin miedo y lo más importante sin vergüenza de quien eres. Siente ese orgullo de ser un ser humano maravillo que como todos tienen sus defectos pero esos que con trabajo mental y emocional se van volviendo más insignificantes.
Haz de tu vida un reflejo de paz, amor y equilibrio
